Xataka
Contenidos contratados por la marca que se menciona.

+info

La mayoría de la gente aún no es consciente de ello, pero el transporte urbano está a punto de experimentar no una, sino varias revoluciones simultáneas que tendrán lugar en paralelo. Estamos hablando de cambios no ya significativos, sino fundamentales en la forma en la que abordamos el uso y propiedad del vehículo, los vectores energéticos e incluso los medios que podremos transitar. Literalmente, hablamos de un antes y un después que redefinirá la forma en la que nos desplazamos.

Este enorme salto al futuro ya ha comenzado. Vehículos como la gama IONIQ de Hyundai, que aborda la movilidad eléctrica con propuestas diferenciadas y próximas al consumidor generalista, son solo el comienzo de una evolución mucho más profunda y que tendrá lugar a lo largo de las próximas dos décadas.

Acompáñanos a conocer los enormes cambios que se avecinan… y cómo Hyundai ya está liderándolos a través de una potente estrategia global que abarca desde el coche autónomo a los robots de uso personal y los vehículos aéreos.

Los robotaxis están más cerca de lo que crees (y afortunadamente no serán como en Desafío Total)

 

Aunque los vehículos autónomos y los robotaxis pueden parecer algo relativamente novedoso, lo cierto es que su mero concepto es antiguo, muy antiguo. Casi tanto como el propio automóvil.

A falta de ordenadores o sensores LiDAR, allá por 1920, se experimentó con la idea de controlar coches por ondas de radio como posible asistencia en caso de atasco, permitiendo que otro conductor operara el vehículo en una suerte de comunicación Car 2 Car primitiva. Décadas después, durante la explosión tecnológica posterior a la Segunda Guerra Mundial, hubo cierto interés por utilizar marcas especiales en la carretera para guiar a los vehículos.

Desde junio de 2022, Hyundai está llevando a cabo un pionero servicio de taxi autónomo en Seúl. Detrás del RoboRide, hay un IONIQ 5 que no requiere input alguno por parte de un conductor humano

Los avances en visión computerizada e inteligencia artificial, por fin, harán de esta vieja idea una realidad tangible. Desde junio de 2022, Hyundai está llevando a cabo un pionero servicio de taxi autónomo en Seúl. Allí, los participantes en el ensayo pueden solicitar su RoboRide, un IONIQ 5 con capacidad de conducción autónoma de nivel 4, es decir, que no requiere input alguno por parte de un conductor humano. Gracias a la cúpula de sensores instalada en el techo y una prodigiosa capacidad de procesamiento, RoboRide ha demostrado ser un servicio totalmente seguro.

Según se ha podido comprobar, los taxis de RoboRide nunca infringen las normas de tráfico, saben detenerse antes de que el semáforo cambie de color y navegan sin complicaciones por vías de cuatro carriles sin necesidad de superar la velocidad máxima urbana de 50 km/h.

Pese a ello (o tal vez por ello), la conducción es tan fluida que puede ahorrar tiempo en los recorridos frente al vehículo particular. Las regulaciones deberán adaptarse para que RoboRide llegue a más lugares de forma abierta, pero, mientras tanto, avances como sus mapas de circulación ya están siendo adaptados para vehículos con conducción autónoma de nivel 3.

El coche compartido desplazará al vehículo en propiedad

Históricamente, el coche ha sido identificado con la libertad individual. La capacidad para desplazarse a cualquier sitio sin depender de terceros ha hecho de él uno de los pilares de las sociedades desarrolladas. Pero algo está cambiando. La congestión de los centros urbanos, el reenfoque del urbanismo moderno en la densificación y el renovado énfasis en la peatonalización de avenidas hacen que mucha gente se replantee tener un coche en propiedad viviendo en una ciudad… por más que vaya a seguir siendo indispensable en muchas otras ocasiones.

Hyundai ya está explorando el potencial del vehículo compartido en entornos tan necesitados de movilidad como el mundo rural a través de VIVe, el primer servicio de carsharing 100% eléctrico para pueblos

Ante esta situación, todo apunta a que el vehículo como suscripción (caso del servicio Mocean) o compartido cobrará un nuevo protagonismo. Las formas en las que este tipo de movilidad se introducirá entre el gran público aún no han sido definidas. Es posible que personas con un coche particular puedan prestarlo, que se promocione la tenencia compartida o que se lancen incluso cooperativas. Hyundai ya está explorando su potencial en entornos tan necesitados de movilidad como el mundo rural a través de VIVe, el primer servicio de carsharing 100% eléctrico para pueblos.

Gracias a VIVe, los municipios participantes ponen un vehículo eléctrico a disposición de sus habitantes junto con un punto de carga, facilitando así pequeños pero imprescindibles desplazamientos como ir al ambulatorio, acercarse a la oficina bancaria o llevar a los niños a la piscina; operaciones que normalmente requieren desplazarse a otros pueblos y que ahora puede llevar a cabo cualquier habitante sin necesidad de tener un coche e n propiedad. Un importante paso en la vertebración y el mantenimiento de los municipios más pequeños y peor servidos por el transporte público.

Movilidad robótica: la tecnología llega para ayudar también a los peatones

La movilidad personal también se explorará en formas todavía en desarrollo y lejos de las cuatro ruedas. A través de la adquisición de Boston Dynamics, fabricante puntero de todo tipo de autómatas, Hyundai avanza en la denominada cuarta revolución industrial, diseñando avanzadísimos robots de logística e inspección industrial que permitirán crear vehículos más fiables y con mayor eficiencia. Pero también servirán para guiar a las personas que más lo necesitan.

Hyundai estudia el potencial del robot cuadrúpedo Spot como guía para invidentes, mientras que el exoesqueleto X-ble MEX ayudará a desplazarse a personas con problemas de movilidad

A su popular perro-robot Spot le hemos visto bailar y como acompañante en actividades con el ejercito o la policía de distintos países, ahora, aunque todavía es una idea en fase conceptual, Hyundai está valorando el potencial del robot cuadrúpedo como guía para invidentes, mientras que el exoesqueleto X-ble MEX ayudará a personas con problemas de movilidad a desplazarse por sí solas, dependiendo menos de las muletas o la silla de ruedas. Esto también es movilidad. Y cambiará como el resto de la industria.

Movilidad Aérea Urbana (UAM), de la ciencia ficción a la realidad

Pero, para Hyundai, el futuro de la movilidad también está en el aire. La idea del taxi aéreo urbano está bastante más cerca de lo que parece y, de hecho, los ingenieros ya trabajan con  para brindar un servicio de transporte que acelerará los desplazamientos en la ciudad. Usando una red de helipuertos lo suficientemente densa, este tipo de vehículos podrán acortar un viaje de 90 minutos a solo 10, todo ello con unas garantías de seguridad elevadísimas.

Con la idea en mente de pequeños aeropuertos urbanos, los ingenieros de Hyundai trabajan para brindar un servicio de transporte que acelerará los desplazamientos en la ciudad

Lejos de hacer que cada edificio tenga su propio espacio de despegue y aterrizaje en la azotea, lo que añadiría problemas innecesarios, Hyundai apuesta por una red de hubs comunitarios modulares, permitiendo crear pequeños aeropuertos urbanos con sus propias instalaciones de compra y recreo. Algo así como estaciones de cercanías, pero fáciles de desmontar si es necesario y exclusivas para vehículos aéreos.

Gracias al transporte aéreo urbano, Hyundai espera poner fin a datos tan onerosos como las 17 horas que pierde anualmente el ciudadano estadounidense medio buscando una plaza de aparcamiento. O los 90 minutos de viaje diario que realizan casi el 29% de los conductores británicos para ir y volver del trabajo.

El hidrógeno tiene mucha vida por delante… especialmente en rutas comerciales

 

Por último, hemos de hablar de los vehículos movidos por hidrógeno. Un viejo anhelo de la industria que, por fin, comienza a tomar forma. Aunque las dificultades a la hora de extraer este elemento para utilizarlo como vector energético (que no combustible) hacen que hasta ahora sea poco económico y eficiente, los últimos avances, así como la creación de infraestructuras más localizadas, presentes allí donde se genera directamente el hidrógeno, hacen pensar que próximamente veremos un buen número de transportes con motor de hidrógeno.

El NEXO, el segundo vehículo de Hyundai de pila de combustible de hidrógeno producido en masa, ya vaticina ese futuro en lo que se refiere a los turismos, aunque, a largo plazo, parece que los transportes comerciales de ruta serán los principales beneficiarios de este tipo de mecánicas. Sus ventajas son numerosas: nulas emisiones (el hidrógeno se utiliza para generar electricidad, produciendo solo vapor de agua como escape), menor peso (no requieren baterías del mismo tamaño que un camión eléctrico) y rapidez de carga (repostar hidrógeno es tan simple como llenar el depósito).

El futuro del transporte por carretera será verde. E iniciativas como Hyundai Hydrogen Mobility, que ya está probando la validez del elemento químico más abundante del universo como fuente de energía para camiones, nos hacen pensar en un mañana más limpio y próspero.

Imágenes | Hyundai