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Es bastante común creer que los fabricantes de automóviles moldean las corrientes de la industria como si esta fuera la arcilla en las que se esculpen sus concept cars. Y es cierto que, gracias al esfuerzo en I+D y diseño, han aparecido nuevas categorías e incluso usos, pero no por ello desaparece la necesidad de satisfacer unas necesidades que son totalmente dependientes de las circunstancias personales y gustos de cada consumidor.

Este consumidor, además, no es monolítico. Igual que la división entre generaciones se aprecia en cuestiones como actitudes hacia el trabajo, los fabricantes saben, a través de focus groups y otras herramientas bastante más complejas, que los compradores buscan detalles y prestaciones acordes con su estilo de vida.

Que sea eléctrico no es una opción más

Uno de los aspectos donde más se aprecia esta divergencia entre gustos y apetencias es la posibilidad de adquirir un vehículo eléctrico en lugar de uno térmico cuando sea posible. A pesar de haberse criado entre el humo de los turbodiéseles, cada vez son más los que apuestan por los vehículos sin emisiones, pero que les permitan seguir disfrutando del mundo del motor más puro, de la adrenalina y la emoción.

Destaca la versatilidad de su batería. Gracias a la función carga bidireccional (Vehicle-to-Load), es posible utilizar el IONIQ 5 N para cargar otros elementos, por ejemplo, un patinete o una bicicleta eléctricos

Hyundai IONIQ 5 N es un buen ejemplo de coche diseñado desde cero con un tipo de consumidor en mente que hasta ahora se asociaba a un deportivo de combustión. Con 448 km de autonomía, tracción trasera y batería de autonomía extendida, este SUV proporciona la flexibilidad necesaria para emprender un viaje de vacaciones con total seguridad, sin los desvelos que provocaban a padres y abuelos el mantenimiento de sus antiguos coches con motor térmico, y todo ello con una aceleración de 0 a 100 de solo 4 segundos.

De todos modos, si es preciso hacer una paradita para cargarlo, es posible hacerlo con un cargador de carga ultrarrápida IONITY y conseguir subir hasta el 80% en tan solo 18 minutos.

Otro aspecto que Hyundai ha cuidado especialmente en la serie IONIQ 5, incluido el modelo N, y que lo hace más atractivo para los consumidores es la versatilidad de su batería, que no se limita a proporcionar la energía necesaria por el motor. Gracias a su innovadora carga bidireccional (Vehicle-to-Load (V2L), el propietario de cualquier IONIQ 5 N puede utilizar su coche para cargar otros elementos, teniendo a su disposición hasta 84 kWh para lo que quiera.

A diferencia de otros vehículos eléctricos, IONIQ 5 N es capaz de proporcionar alimentación inversa (del coche a dispositivos externos). Por ejemplo, es posible cargar un patinete o una bicicleta eléctrica para completar rápidamente aquellos desplazamientos en los que usar el coche resulte más farragoso, o incluso para proporcionar electricidad para todo tipo de aparatos si nos vamos de acampada, evitando así el uso de estufas de gas y generadores con motor de explosión.

No quieren adaptarse al coche, sino que el coche se adapte a ellos

No hay más que echar un vistazo a nuestro alrededor para darse cuenta de que los conductores se sienten totalmente cómodos en un nuevo mundo que gira en torno a una tecnología que abandona los antiguos paradigmas de activación mecánica. Son unos consumidores que no necesitan buscar diales, botones o interruptores de cualquier otro tipo, habiendo sustituido esa memoria muscular de «dedo hasta el fondo», tan propia de otra era, por unos gestos más parecidos al uso del teléfono móvil.

En el salpicadero se incluye una primera pantalla de 12,25 pulgadas que presenta información como la velocidad de marcha o la autonomía restante, y una segunda, del mismo tamaño, que proporciona acceso a las funciones de conectividad, navegación y entretenimiento, así como a los controles de climatización

Siguiendo este nuevo paradigma de uso, IONIQ 5 N plantea un manejo de sus controles simplificado y, sin embargo, con un número de posibilidades importante. Elementos como el arranque del motor y la climatización cuentan con sus botones dedicados para un mayor confort y garantizar ese feedback tan necesario en ciertas operaciones, pero la información de ruta necesaria y gran parte de los mandos son ahora totalmente digitales.

La organización de esta información es mucho más visual y clara que la posible mediante el uso de pequeños displays digitales de tipo reloj o aquellas primitivas pantallas LCD de los primeros centros multimedia, que se tornaban difíciles de leer bajo los rayos del sol. IONIQ 5 N impresiona con un salpicadero que incluye una primera pantalla de 12,25 pulgadas que presenta información como la velocidad de marcha o la autonomía restante de forma clara y legible, mientras que una segunda, del mismo tamaño, proporciona acceso a las funciones de conectividad, navegación y entretenimiento, así como a los controles de climatización en caso de no querer utilizar los botones físicos.

Estos avances en la digitalización de la cabina y la conducción hacen que IONIQ 5 N proporcione una experiencia de conducción custom frente a los coches de antes, que simplemente eran medios de transporte utilitarios más o menos lujosos, pero siempre con una personalización mínima

También es posible utilizar ordenes de viva voz, gracias al uso de un asistente digital en caso de que se prefiera operar en modo manos libres, imitando así el uso de un teléfono móvil que es parte integral de nuestra vida. Estos avances en la digitalización de la cabina y la conducción hacen que IONIQ 5 N proporcione una experiencia de conducción custom frente a los coches de antes, que simplemente eran medios de transporte utilitarios más o menos lujosos, pero siempre con una personalización mínima. Por primera vez, el consumidor deja de adaptarse a su automóvil y empieza a suceder lo contrario.

Personalización: más que una cuestión estética

Finalmente, IONIQ 5 N también aborda la necesidad de hacer propia la experiencia de conducción desde el punto de vista estético y dinámico. Porque para muchos conductores no basta con decir «tengo este modelo de coche de esta marca en concreto». El propio vehículo se convierte en una extensión de sus gustos y sensibilidades estéticas, de forma que rasgos tan impactantes como la línea lateral en zig-zag, el alerón trasero o los reflectantes traseros pixelados se pueden complementar con llantas de aleación con diseños extremadamente elaborados y en el interior con tapizados que se extienden por superficies donde antiguamente solo encontraríamos plástico.

IONIQ 5 N lleva estos niveles de personalización más allá con una propuesta de alto rendimiento. El primer modelo N totalmente eléctrico eleva el tamaño de las llantas hasta las 21 pulgadas y proporciona una conducción deportiva casi a medida gracias a la tecnología N e-Shift, que, frente a otras mecánicas eléctricas, permite gestionar de una forma más manual la entrega de potencia.

A este avance se suma la tecnología Active Sound+, que modifica la respuesta sonora del coche para tener un control más instintivo del mismo (algo crítico en un eléctrico, puesto que con las baterías desaparece el tradicional ruido motor); y N Drift Optimizer, que ayuda a mantener el ángulo de derrape para las escapadas al circuito del fin de semana. Una versión radicalmente diferente que demuestra la flexibilidad de las mecánicas eléctricas y cómo pueden adaptarse para satisfacer los deseos de un público tan variado en sus necesidades y gustos como es el de los conductores.

Imágenes | Hyundai